martes, 28 de octubre de 2008
XI. Podría dormir...
Podría dormir para siempre
y ojalá se cayeran en mi
los párpados de las noches sin lunas
Podría dormir para siempre
ver un niño
y escuchar un risa íngrima
Podría dormir y ver todo
Aún así
Aún así podría dormir
y quedarme ausente.
Daniel Pérez Astros
y ojalá se cayeran en mi
los párpados de las noches sin lunas
Podría dormir para siempre
ver un niño
y escuchar un risa íngrima
Podría dormir y ver todo
Aún así
Aún así podría dormir
y quedarme ausente.
Daniel Pérez Astros
domingo, 19 de octubre de 2008
X. La Luz y el Piso
La Claridad cayó en el Piso y le quebró su orgullo. En el callejón sin salida pasan los valientes y los estúpidos; los que no temen por sus vidas o los que no se dan cuenta que la pierden en cada paso que dan hacia el vacío. La Luz y el Piso Roto, anunciando caos, reta al solitario a que pase entre los dos. Ahí, los esperan con un grito de muerte y una semi-lluvia que alimenta al miedo (ese gusano infecto que te arranca las tripas). El aire se hace más denso. La sensación de pesar ya se ha instalado en tu pecho y caminas hacia un rito de muerte. Los grillos y sapos del charco están anunciando tu final. Los ignoras. Sigues. Ahora la luz te lleva. Eres ella.
“Ya no me pertenezco” – finalmente piensas-
Daniel Pérez Astros
sábado, 11 de octubre de 2008
Empleo de diablo
Inmerso en el desvelo repasaba las líneas de la mano
con la luna en mi patio
abrí los ojos para observarle
pero mis lamentos se escaparon en un soplo
las penas me despertaron
y así comienza el día para distribuir las tentaciones
en mi digna ocupación de diablo
con la luna en mi patio
abrí los ojos para observarle
pero mis lamentos se escaparon en un soplo
las penas me despertaron
y así comienza el día para distribuir las tentaciones
en mi digna ocupación de diablo
Juana Emilia Kahlo
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