sábado, 11 de octubre de 2008

Empleo de diablo

Inmerso en el desvelo repasaba las líneas de la mano

con la luna en mi patio
abrí los ojos para observarle
pero mis lamentos se escaparon en un soplo

las penas me despertaron
y así comienza el día para distribuir las tentaciones
en mi digna ocupación de diablo
Juana Emilia Kahlo

1 comentario:

Daniel Pérez Astros dijo...

Hasta el Diablo parece que se aburre de siempre hacer lo mismo. O al menos, yo me aburriría.
Quizá no debería tentar por un tiempo y tomarse un baño con vapor... jajaja =)